El gobernador del estado Enrique Alfaro, menciona que al menos 70 por ciento de los textos están almacenados.
Este lunes el Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro manifestó que mientras no haya una resolución judicial, no se repartirán los libros de texto en el estado.
En rueda de prensa, junto con el Secretario de Educación, Juan Carlos Flores Miramontes, los funcionarios mencionaron que los docentes de Jalisco podrán apoyarse con recursos publicados en internet en Recrea Digital.
‘Hemos recibido los nuevos libros de texto en nuestros almacenes, el amparo impide que lleguen a las manos de los niños por esta determinación del juez de protegerlos, con el argumento que el programa no se consultó con los estados y padres de familia’.
El Mandatario dijo que está en sintonía con el proyecto de la Nueva Escuela Mexicana, pues no hay diferencias de fondo con el Gobierno federal, pero precisó que los errores hasta ahora encontrados en los libros serán corregidos por los maestros en sus clases.
De acuerdo con el Secretario de Educación, Juan Carlos Miramontes, actualmente ha llegado el 70 por ciento de los libros, los cuales están almacenados.
Precisó que los libros de secundaria vienen retrasados y que la Federación dijo que estarían hasta octubre en la Entidad.
Por ahora, Jalisco, Chihuahua y Guanajuato son los únicos estados que se opusieron a distribuir los libros de la SEP en las escuelas primarias y secundarias, los cuales han presentado varios errores, entre los que se encuentra una infografía de ejemplo que venía errónea.
La semana pasada la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, declaró que tampoco repartirán los libros de texto ante una instrucción gubernamental.
‘En Guanajuato, se concedió el amparo justamente la semana pasada, entonces yo no sé por qué se están repartiendo (los libros de texto), pero aquí es una instrucción por parte de la gobernadora a la Secretaría de Educación Pública de detener esta distribución de libros bajo, también, la figura del amparo’, finalizó.
La decisión de los estados de no utilizar los libros de la Secretaría de Educación Pública, se debe en parte a la presión de las asociaciones de padres de familia que se sienten inconformes e incómodos con el contenido.